SOLA
Vivía en soledad. No porque le gustara. Era el miedo. Miedo a que la juzgaran por su apariencia, miedo a mostrar su verdadera esencia. Se refugió en su hogar donde era feliz a su manera, con sus libros y su música. Y su luz, esa que sólo ella veía y sólo a ella iluminaba. Pero esa noche decidió cambiar. Se armó de valor y saltó a la calle decidida a sentir la libertad. Al fin y al cabo, pensó, soy igual que los demás.
Paseando contó cuarenta rostros observándola casi inmóviles desde muchas ventanas... ¿Tendrían ellos también miedo a salir?
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Este es mi relato del mes de Abril para el reto de Escribir jugando que nos propone el blog de Lidia.
Se trata de hacer un relato de un máximo de 100 palabras (sin contar el título) inspirado en la carta y dado que muestro a continuación. Como condición adicional voluntaria debe aparecer el número cuarenta.
Si os animáis, aún estáis a tiempo de presentar vuestro relato.
Para ilustrar este relato mío una plantilla de una brújula y gris y amarillo, los colores que creo van perfectos al contenido. Ya sabéis que el libro es una propuesta de Stella. Pasad por su blog que este mes ha hecho también un relato precioso. Hasta pronto y Feliz Semana Santa!!
